Hace unos 10 años, por azares de la vida, empecé a estudiar Acupuntura.

 Tengo que decirte, que después de leer varios libros, hacer un Máster en Acupuntura, estar un año con mi Maestro Bruzos, otro año con mi Maestro Alejandro y otro Año con mi Maestro Camilo, mi conocimiento real era muy, muy limitado.

Siempre recuerdo la frase de otro Maestro, que me decía:

“No puedes aprender acupuntura en menos de 4 años”

Y así, perdido y con un jaleo en la cabeza descomunal, se pasaron unos años.

Y otra vez el azar, o mi cabezonería, no sabría decirte, me topé con un Maestro Coreano, el Señor UH.

Estando con él aprendí la técnica de la Acupuntura Coreana, que se basa en poner pequeñas agujas en las manos, pero lo que aprendí con él, fué algo mucho más importante…

Resulta que a pesar de llevar 40 años en España, es una persona que casi no habla Español.

Y claro, aprender de mirar, no es fácil.

Pero me pasó algo inesperado.

Resulta que yo sabía para que ponía cada aguja.

Conocía el punto y conocía el motivo para utilizarlo.

Y es ahí, cuando por fin me di cuenta de todo lo que realmente sabía.

Los años anteriores de estudio, por fin dieron sus frutos, y ahora, además del estudio, tengo la práctica, ya que llevo más de 5000 sesiones realizadas.

Y cuando juntas las dos cosas, la práctica y el conocimiento, pues los resultados mejoran mucho.

Mi formación como Entrenador personal, Kiromasajista y Dietista, también influyen en los resultados, claro!

Como puedes ver, esto es una página sencilla, igual que la acupuntura cuando la entiendes.

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